El milagro economico colombiano, como lo han denominado muchos, no es tan milagroso como se piensa sino que ha sido producto de una situación coyuntural que se encuentra ligada tanto a factores de caracter interno al pais, como a factores externos que se encuentran ligados con el ambiente geopolitico mundial; para evidenciar esta situación, es necesario remontarnos al año 2002, momento en que inicia el primer mandato de gobierno de Alvaro Uribe Velez y como de la mano de sus programas bandera orientados a fortalecer la confianza inversionista y recuperar la seguridad en la integridad del territorio nacional, se empiezan a dar los primeros pasos tendientes a conformar un escenario sostenible en el mediano y corto plazo que permita incrementar el PIB del pais, reducir el deficit fiscal y ubicar a Colombia internacionalmente en el ambito politico como un jugador importante regionalmente, sin embrgo estas medidas por si solas no fueron el factor determinante, pues tal y como se menciono previamente, fue necesario factores externos, tales como el deterioro en las condiciones de estabilidad de los vecinos, quienes al iniciar sus procesos de nacionalización de empresas privadas, se encargaron de reorientar los flujos de inversión a paises con mayor estabilidad.
No es raro entonces que de la mano de una reducción en el crecimiento economico de Venezuela, el cual en el año 2007 se encontraba en 8.8%, llegando para el año 2010 al -1.5%, el de Colombia se haya ubicado para los mismos años en un 6.9% y 4.0% respectivamente, aunque si bien podría decirse que la tendencia decreciente es evidente en ambos casos, también es evidente que el impacto que enfrentaron luego de la crisis financiera del año 2008, fue diferente en ambos paises, revelando las condiciones macroeconomicas divergentes de ambos paises hermanos; es claro que Venezuela es un pais con una mayor riqueza petrolifera que Colombia, y esta última es quien ha recibido mayores cifras en inversión en este sector, en tanto el primero ve su producción disminuye paulatinamente, dejando de beneficiarse de la actual coyuntura de precios del crudo en torno a los 100 USD.